El 27 de marzo, a las 19,15 h,
M.A.R.
Editor llevará a cabo, dentro de las actividades de Tenerife Noir, la presentación
de la novela ganadora del Premio Wilkie
Collins de Novela Negra El
edén de las manitas de cerdo
de Enrique Pérez Balsa,
en Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Tenerife.
Asimismo,
a las 20 h, en el mismo recinto, se llevará a cano la presentación de Desayuno
para el muerto de Jesús Javier Corpas Mauleón, accésit
del Premio Wilkie Collins de Novela Negra.
Antes
de comenzar la presentación de las novelas, a las 19h, el comisario de Tenerife
Noir, Javier Hernández Velázquez,
junto con el editor de M.A.R. Editor, Miguel
Ángel de Rus, entregará los diplomas acreditativos del Premio Wilkie
Collins de Novela Negra a ambos autores.
El
edén de las manitas de cerdo es
una novela negra que nos presenta las peripecias de Luis, un personaje
anodino al que el destino y las decisiones equivocadas conducen a un
callejón sin salida, convertido prostituto, se verá inmerso en el centro
de una red delictiva que amenaza con hacer saltar por los aires mucho más
que su ya deteriorada vida personal, familiar, profesional y social.
Comprenderá que la vida no era un juego y que ha entrado en relaciones
económicas con un grupo mafioso para el que la vida no vale nada. Sobre esta
novela negra con toques de humor, que recuerda a Eduardo Mendoza, afirma Enrique
Pérez Balsa: “Es una crítica a la sociedad actual, se intenta enriquecerse
con el mínimo esfuerzo. Los hombres por naturaleza somos estúpidos y no te
cuento si encima creemos que puede haber sexo, la sangre se va al pene y nos
quedamos sin riego en el cerebro con lo que cualquier atisbo de inteligencia se
pierde inexorablemente y es el momento en que empiezan los problemas. El
protagonista es un tipo anodino al que le ofrecen un negocio turbio pero que
acepta pensando que es una manera fácil de tener sexo y encima remunerado.
¡¿Quién puede pedir más?! Pero se encuentra con que la vida te trae sorpresas,
las mujeres no son lo dóciles que se muestran en los vídeos porno; seleccionan
y exigen, juegan con él como el pelele que es y se convierte en una marioneta
en sus manos. Luego la trama se complica con un asesinato y los proxenetas
queriendo linchar a nuestro protagonista”.
El
autor muestra su novela negra como un crisol de influencias: “Soy un apasionado
de los cómics. Leí y releí historias de Edgar Alan Poe o Lovecraft, ilustradas
por Bernie Wrightson o Richard Corben, hasta el último que he leído “Locke
& key”, de Joe Hill y Gabriel Rodríguez. Dentro del mundo del cómic hay mil
autores en estilo de novela negra, me viene a la cabeza “Silencio” de Comès,
“Taxista” de Martí o “Sin city” de Frank Miller. En cuanto a escritores de
novela negra, entre los maestros, a Juan Madrid, Chester Himes, Boris Vian, Jo
Nesbo, Andrew Kevin Walker, Olga Mínguez Pastor, Francisco Javier Illán Vivas o
Carlos Augusto Casas”.
En
Desayuno
para el muerto
se nos presenta una historia negra y criminal en Pamplona, en las
Fiestas de San Fermín. Óscar Serrano, “Plinio”, comandante de infantería
destinado en el CNI español, viaja a Pamplona, su anterior destino, con objeto
de disfrutar junto con sus colaboradores y amigos, del final de las fiestas de
San Fermín. Su curiosidad innata y su intuición le lleva a investigar un
incidente en el curso del último encierro que hubiera pasado desapercibido a
otros, pero cuyo olor a chamusquina despierta el instinto de Plinio quien
adivina que bajo el episodio aparentemente trivial hay algo importante. En
Pamplona se urden historias de los servicios de investigación españoles, de los
movimientos anticastristas de la comunidad cubana de Miami, de los organismos
de información del régimen de Cuba y de la CIA. Afirma Corpas Mauleón sobre su obra “Pamplona fue la Meca de los espías,
tanto en los conflictos mundiales o las reiteradas invasiones francesas, como
en la media docena de guerras civiles que se dieron en los cien años previos a
1939. El ascensor que cito en Desayuno
para el muerto transportó unos cuantos desde 1912. Lo que refiero de la OAS
también ocurrió en esta ciudad. Y las fiestas de la capital navarra han
camuflado entre su multitud diversas conspiraciones. Encima, habituales en
ellas son norteamericanos y miembros del exilio cubano. Un celofán perfecto
para envolver este enredo”.
La
tesis que se puede obtener de la novela es que los ciudadanos vivimos en una
dictadura encubierta, así lo explica Corpas Mauleón: “A los ciudadanos nos
ocultan la mayor. Algunos, que protegen su tinglado, acostumbran a justificarlo
diciendo que somos incapaces de entender. Con la boca engolada, dictan que a
veces no votamos lo que conviene (¿a quién?); y que por ello debe ser su dedo
quien nos ordene el camino de la verdad absoluta. Ahí están esos tres mil
despachos que se dedican a agasajar eurodiputados para que cambien leyes a fin
de que, por un poner, se tiren a la basura cien millones de televisores y se
compren otros tantos. Cuando se mueven tales fortunas, Maquiavelo se impone
sobre la deontología. Por otras razones, se clasifican como secretos documentos
tan importantes como los del 11M o 23 F, que consideran no debe conocer la
opinión pública. Algunos de esos sucesos resuenan al fondo de esta crónica sobre
servicios secretos, como ecos de una batalla lejana”.